Inauguración de Manel Doblas (8 enero 2010)

La Sala Rusiñol, como quien dice, ha estrenado el 2010 con la exposición «Realismos contemporáneos», de Manel Doblas. Realismos contemporáneos, pero -diríamos- con nostalgias del pasado: vías de tren que sugieren la rapidez de la contemporaneidad, pero también vías y estaciones tal como el artista las recuerda de su infancia y juventud. Aunque no todo son vías…

Ignasi Cabanas, director de la Sala Rusiñol, da la bienvenida a todos: al año 2010, al artista y los asistentes a la primera inauguración del «año que inauguramos». Manel Doblas es la segunda vez que está en la Sala Rusiñol. Ha experimentado un marcado cambio de temática: no en vano ha estado dos años trabajando esta obra que ahora admiramos.

Como ya es habitual en él, Josep Mª Cadena contribuyó a caldear el ambiente, que era muy frío (por lo menos en la calle). Glosó la idea de que estas obras sugieren una especie de paralelismo con lo que es la vida: estas vías nos hacen pensar en los distintos caminos que nos encontramos a lo largo del recorrido de nuestra vida. Es inevitable: «Hemos de recorrer uno de estos caminos».

Manel Doblas dijo sentirse especialmente contento de esta exposición suya. El tema de las vías y estaciones de tren viene de recuerdos de la infancia: «Yo llegué el año ’62 en tren a Barcelona, a la Estación de Francia. Estos cuadros también recuerdan mi época de estudiante, durante la cual viajé mucho en tren y tuve que esperar muchas horas en las estaciones».

Ignasi Cabanas hace una síntesis final de los diversos aspectos de la obra y persona de Manel Doblas que hemos ido escuchando, y le agradece el notable esfuerzo de preparación para esta exposición. «Damos paso, ahora, a los sorteos habituales de nuestras inauguraciones…».